miércoles, 29 de abril de 2015

Llenaste mi vida de color.



Te he querido por el mundo que trajiste contigo. Yo no esperaba nada, vivía, iba a los sitios, llegaba tarde, me hice a la rutina de aquellos que caminan por la calle sin levantar la vista del suelo. Pero te conocí, y trajiste contigo tu mundo y lo llenaste todo con él. Corriste las cortinas, abriste las ventanas de esta habitación vacía y entró el aire. Y yo que me había cerrado por completo, sonrei y te dejé pasar. Me agarré al miedo porque pensé que daba seguridad, porque pensé que era mejor que atreverse. Pero, que es una vida sin atreverse a lo desconocido? Luego recordé la libertad, el saltar agitar las alas y dejarme caer. Y en la caída creer que estoy volando. Ahora lo entiendo mejor. Y conseguiste hacerme creer que volaba con tan solo mirarme. Llenaste mi vida de color, trajiste flores nuevas, limpiaste el polvo, cantabas canciones por las mañanas al despertarnos cuando el sol aun no había empezado a asomarse. Me abracé a lo desconocido. Lo cambiaste todo tanto que, cuando estaba a tu lado eran los atardeceres los que se paraban a mirarnos porque habías llegado, y habías traído contigo un mundo precioso.

sábado, 25 de abril de 2015

No te voy a negar.


No te voy a negar que llegaste a ser para mí más de lo que pensaba que serías. Que todo empezó como si nada, y poco a poco tuve la sensación de querer que siempre estuvieras. Yo no sé que hicieron tus padres aquella noche, para que desprendieras tanta dulzura cuando hablabas.
Muchas risas, muchos momentos que no sabría explicarte con palabras. Tantas noches deseando que hubiera una noche más. Que si una hora más, que si un ratito más, que si un día más. Empecé a quererte todos los momentos, todo iba en aumento.
Pero no siempre las cosas van como queremos. Las discusiones también lo hicieron. Tus dudas. Tus silencios. El no poder fiarme ya de tu mirada. Esa que ya no es tan limpia como en nuestro primer beso. Aun recuerdo también como te reías después de los orgasmos.
Y te encuentro por ahí, en cualquier bar. En cualquier mano, en cualquier boca. Y no te voy a negar, que te echo algo de menos. Seguramente nunca me olvidaré del todo, como pasa cuando sientes de verdad.

Pero no te confundas tú tampoco. No quiero que vuelvas. Creo que por una vez, el daño ya tuvo suficientes dosis tuyas.

sábado, 18 de abril de 2015

No es por eso..Sino..


No es porque seas precioso, ni porque apenas creas en el amor. 
Tampoco es porque al cruzar las manos, tus dedos siempre sobresalgan sobre los míos. 
No es por tu mirada constante, ni por tus ganas de cambiar el mundo. 
Tampoco por la puerta al cielo que tiene tu sonrisa algunos lunes. 
No es porque hagas volar nubes cuando te aviso de mis tormentas.
Ni porque dibujes mi hoyuelo izquierdo cada vez que te hablo de guerras de un solo bando.
De verdad, te lo juro, tampoco es porque entiendas todas y cada una de mis expresiones ni porque te partas de risa con mi risa, ni porque habites en el mundo como mi rey.
No es porque en la cama bailes como nadie, no es porque te muevas como una serpiente en la vida. 
No es porque tus películas sean mis historias favoritas.
No es porque tus lágrimas sean mis ganas de matar.
Ni porque tu ombligo sea la llave a los viernes de verano.

Es por la magia, por el ruido, por las interferencias. 
Es por la complicidad, por los besos en la nuca. 
Es porque tú en invierno, siempre has sido primavera.
Es pura y sinceramente porque eres la única persona por la que siempre renunciaría al resto.
Te quiero.